El primer barrio multiecológico de España estará en Lugo

Impulsado por el Ayuntamiento de Lugo, el proyecto Life Lugo+Biodinámico está transformando la ciudad hacia un modelo de desarrollo urbano sostenible a través de una estrategia innovadora de planificación urbanística de acción frente al cambio climático. En este contexto, el edificio ‘Impulso Verde’ se plantea como símbolo y semilla del primer futuro barrio multiecológico en España: se trata de un edificio de consumo energético casi nulo, con certificación Verde emitida por GBC España, cuya construcción se prevé para 2020-2021. Realizado en su totalidad con estructura de madera local, será modelo de cambio de paradigma constructivo a modelos sostenibles, respetuosos con el medio ambiente.

Las 28 acciones desarrolladas dentro del proyecto Life Lugo+Biodinámico engloban la implementación de una estrategia de desarrollo urbano sostenible con la elaboración y aprobación a nivel municipal de un Catálogo de Soluciones de Diseño Urbano (51 soluciones de diseño urbano multifuncionales de aplicación a diferentes escalas: edificio, valle, barrio y ciudad) y de un Plan Estratégico Biodinámico (se trata de una planificación biodinámica de adaptación progresiva ambiental y socioeconómica de un barrio multiecológico al cambio climático aplicado a un área de 21 ha, como ejemplo demostrativo), que servirán de modelo para el desarrollo urbano del futuro inmediato en la ciudad de Lugo y será transferible a otras ciudades de tamaño medio de todo el mundo.

Cofinanciado por el Programa Life de la Unión Europea, el proyecto está impulsado por el Concello de Lugo, con la aportación de la Diputación de Lugo, la Universidad de Santiago de Compostela y la Universidad Politécnica de Madrid, como socios.

Las actuaciones presentadas se enmarcan en el área norte de la ciudad, sumando un total de 40 ha, que abarca área urbana, A Garaballa, con dos polígonos industriales, O Ceao y As Gándaras. En esta área nace el río Rato, que junto con el Fervedoira y el Miño conforman el futuro cinturón verde/azul de la ciudad, el cual se pretende completar en el área norte a través de este proyecto. Todas ellas pertenecen a la Reserva de Biosfera Terras do Miño, la de mayor extensión de Galicia.

Las acciones sobre ecosistemas forestales (19,7 ha) ya se han desarrollado en su totalidad, englobando: la recuperación de un humedal higrófilo, el establecimiento de un bosque de castaños con variedades tradicionales, la creación de un Arboretum y la implantación de una masa forestal de frondosas autóctonas.

En cuanto a las acciones de planificación urbana propiamente dichas, están asociadas principalmente a la creación del barrio multiecológico en Lugo, la implantación de agricultura urbana de suelo y altura, así como la construcción del edificio público ‘Impulso Verde’, realizado con madera y cuyo proyecto se ha completado y está pendiente de licitación pública.

‘Impulso Verde’: madera gallega

Será el icono más reconocible del nuevo barrio y su construcción se prevé entre 2020-2021. Será el primer edificio en altura con estructura de madera contralaminada procedente de Galicia, que contará además en su construcción con elementos Km 0 (estructura de madera, material de cubrición con piedra local, etc.). Tendrá cuatro plantas, una superficie de 682 m2 y en su concepción se aplicaron criterios bioclimáticos para mejorar el ahorro energético; además, contará con producción fotovoltaica, con una caldera de biomasa para calefacción, así como un sistema de ventilación mecánica controlada con un recuperador de calor que recupera calor del aire que se extrae para aportarlo al que entra del exterior y mirorar así las pérdidas. Asimismo, incluirá sistemas de ahorro de agua.

Este proyecto arquitectónico es resultado del trabajo de un equipo compuesto por personal de la Universidad de Santiago de Compostela, la Universidad Politécnica de Madrid y el Concello. El equipo está formado por el investigador principal Manuel Guaita, los arquitectos autores Antonio J. Lara Bocanegra y Susana Penedo Souto, junto con varios arquitectos colaboradores: Almudena Majano-Majano, Belén Feijoo, José Luis Gómez-Royuela, Luis Lozano-Bodegueroa y Jose Antonio Lorenzana.

El edificio piloto ‘Impulso Verde’ nace con la vocación de convertirse en un referente en la lucha contra el cambio climático de la sociedad gallega, proponiendo un nuevo modelo constructivo de edificación en altura realizado en su totalidad con estructura de madera local. Se trata de un edificio municipal de estándar bajo energético, donde conviven estrategias de acondicionamiento tradicional con criterios de construcción pasiva en madera. Tendrá uso público y actividad permanente, y albergará servicios municipales, un espacio coworking para empresas relacionadas con el medio ambiente y el cambio climático, una zona expositiva y un aula de formación, distribuidos en cinco niveles.

Con más de 18 m de altura, la estructura se resuelve completamente con madera gallega, en gran parte mediante paneles de CLT de pino radiata, producto también desarrollado en el marco del proyecto europeo, cuya evaluación ha sido realizada por la Plataforma de Ingeniería de la Madera Estructural (Pemade) de la Universidad de Santiago de Compostela. En este sentido cabe destacar que, previo al diseño del edificio, Pemade realizó en el contexto del proyecto Life Lugo+Biodinámico la primera Gridshell de madera de España, que fue premiada en el Congreso Mundial de Ingeniería de la Madera (WCTE 2018) en Seúl.

Por lo que se refiere a su envolvente, se resuelve mediante soluciones ligeras de tipo pasivo, y su acabado exterior se realiza mediante una piel de pizarra, material de gran tradición local. Desde un punto de vista espacial, la propuesta trata de conectar al usuario con la naturaleza a través del empleo de la madera como material predominante y de la inserción de espacios intermedios ajardinados destinadas al descanso y la distensión, los cuales constituirán una prolongación del parque exterior en las zonas de actividad. Desde un punto de vista de acondicionamiento, estos espacios intermedios funcionan como reguladores térmicos, permaneciendo abiertos o cerrados según las condiciones climatológicas exteriores, de modo similar a la galería tradicional gallega.

El edificio contará con energía fotovoltaica, y unas instalaciones térmicas de alta eficiencia que serán gestionadas por un sistema de control en tiempo real, según las condiciones de humedad, temperatura y calidad del aire, del interior y del exterior.

Crecimiento urbano sostenible

La creación del primer barrio multiecológico de España trasciende, con mucho, la construcción de un edificio como ‘Impulso Verde’. Su planificación, impulsada por el Ayuntamiento de Lugo en el marco del proyecto europeo Life Lugo+ Biodinámico, se encuadra al norte de la ciudad dentro de la estrategia de crecimiento urbano sostenible proyectado en el Plan General de Ordenación Municipal (PGOM), cerrando el entramado urbano residencial colindante con las zonas industriales del Ceao y las Gándaras.

Este barrio forma parte del ámbito ‘Parque lineal verde’ que envuelve toda la ciudad, desde el oeste al noroeste, siguiendo los cursos fluviales del Miño, Ratón y Fervedoira, y promueve el desarrollo sostenible, contribuyendo al logro de los objetivos y metas establecidos en la Agenda 2030. Orientada a lograr una efectiva ordenación urbana adaptada al cambio climático, al tiempo que se genera un entorno urbano equilibrado, habitable y sostenible, la propuesta ha considerado en su ordenación no solo criterios económicos, sino también valores ambientales y sociales.

Así, por ejemplo, la existencia de huertos comunitarios cumple funciones socioculturales importantes y busca contribuir de forma significativa a la cohesión social y a la seguridad alimentaria; la propuesta se adapta al terreno natural, sin variar la topografía existente utilizando de forma racional el territorio y los recursos naturales... Se garantiza, por tanto, la compatibilidad entre crecimiento, desarrollo y progreso económico y la preservación del medio ambiente y de los valores paisajísticos, culturales, históricos y etnográficos del territorio, con el fin de asegurar la calidad de vida de la población actual y de las generaciones futuras.

El barrio se concibe como un sistema urbano autárquico para minimizar la presión sobre lo sellado de la tierra, la agricultura y la biodiversidad. Se persigue alcanzar el máximo nivel de autosuficiencia para obtener un sistema neutro en carbono apostando por la generación de energía renovable. En esa misma línea, se vincula el desarrollo urbano al ciclo del agua en su expresión local (captación de agua de lluvia, reutilización de agua utilizada); se busca la máxima autosuficiencia hídrica que combine también las medidas de captación con las medidas de ahorro y eficiencia; y para la confortabilidad y seguridad de los ciudadanos, se controlaron las variables del entorno como elementos clave de la habitabilidad: temperatura, sombras, paisaje sonoro, volumen verde, diversidad urbana o inmisión contaminante.

De igual modo, se ha fomentado la protección de la atmósfera y el uso de materiales, productos y tecnología limpias que reduzcan las emisiones contaminantes y de gases de efecto invernadero del sector de la construcción, así como de materiales reutilizados y reciclajes que contribuyan a mejorar la eficiencia en el uso de los recursos.

En la organización de los espacios, se buscó crear una ‘aldea urbana’ que proporcione a la vecinos vivienda, transporte, instalaciones y servicios recreativos y comunitarios, espacios públicos y pequeños comercios. De esta manera, se crea un abanico amplio de usos en el barrio. Para facilitar la diversidad y la cohesión comunitaria, estos servicios e instalaciones atenderán las necesidades de grupos sociales diferentes con distintos intereses y demandas.

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