La Asociación Española de Sociedades de Protección contra Incendios (Tecnifuego) constata la recuperación económica en el sector de la seguridad contra incendios. Durante 2023 la facturación total aumentó un 9,85%, alcanzando los 2.953 millones de euros. Se trata de un dato favorable ya que se han superado las cifras de anteriores a la crisis sanitaria (2.781 millones de euros en 2019). Los datos de este año confirman la tendencia al alza de la actividad, que en 2022 creció un 8%.
Esta recuperación ha permitido una mejora de la posición financiera de las empresas, una mayor inversión en nuevas tecnologías e infraestructuras de producción y un aumento en la contratación de personal. Sin embargo, existen debilidades debido a la situación económica mundial y nacional que es probable repercutan a medio plazo. Así, entre otros factores que pueden afectar de manera negativa se pueden mencionar el aumento de la inflación a nivel global, el endurecimiento de las condiciones financieras y el empeoramiento del acceso al crédito.
De cara al 2024, según el último informe del Banco de España, se dan circunstancias de incertidumbre relevantes. A nivel internacional, destaca, como en trimestres precedentes, la evolución futura de las actuales tensiones geopolíticas y de la guerra en Ucrania. Un eventual recrudecimiento de éstas conduciría, con elevada probabilidad, a un nuevo encarecimiento de las materias primas y, por tanto, a un repunte de la inflación y un deterioro de la actividad.
En el ámbito doméstico, cabe señalar las dudas que persisten en cuanto al ritmo de ejecución de los proyectos asociados al programa Next Generation EU y a su impacto sobre la actividad.
Si bien, desde el ámbito de PCI se espera que la modificación del Reglamento de seguridad contra incendios en establecimientos industriales (RSCIEI), que probablemente se publique en marzo de 2024, contribuirá a un aumento de la actividad de instalación y mantenimiento industrial que proporcionará un aumento en la actividad y facturación general del sector.
El número de empresas del sector de protección contra incendios se mantiene en 900 compañías de más de 20 trabajadores que emplean a 18.000 personas.
La marca utiliza materia prima reciclada en sus procesos de fabricación, diariamente depura cierta cantidad del agua para reutilizarla y, además, el 100% de la energía eléctrica que se consume en su fábrica de Santander proviene de fuentes renovables.
La Fundación Laboral de la Construcción organizó una jornada online sobre la prevención frente al cambio climático en las obras.
La compañía unifica sus marcas comerciales en España: Cementos Molins Industrial, Promsa, Propamsa, Pretersa-Prenavisa y Precon.
La empresa cuenta con varios productos certificados como Cradle to Cradle Silver, siendo el primer y único fabricante de placas de yeso laminadas con productos certificados nivel Plata.
El salón abordará grandes retos en el sector de la edificación, como son la sostenibilidad y la innovación, a través de un extenso programa de actividades profesionales.
Su gama futuRE, respaldada por sus marcas Saint-Gobain Glass, Isover, Placo y Weber, incluye las soluciones y servicios más sostenibles.
La marca busca desechar ideas erróneas y permitir que los usuarios aprovechen plenamente la tecnología para una vida cotidiana cómoda, segura y eficiente.
La marca ha desarrollado la nueva gama Aquaforce 30XF, cuyo principal objetivo es la refrigeración de los centros de datos, maximizando la eficiencia energética.
Lo incorpora en su exitosa serie de mecanismos Simon 270, incluida su estética Mínima. Esta serie completa así su gama cromática y ofrece una selección de tonalidades que se integran con todo tipo de materiales, mobiliario y complementos.
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