Más de 200 profesionales de la arquitectura y el sector de la construcción asistieron este jueves, 18 de mayo, al VII Congreso de Arquitectura y Salud, organizado por la Agrupación de Arquitectura Sostenible (AuS), el Colegio de Arquitectos de Cataluña (COAC) y la Asociación de Estudios Geobiológicos (GEA). La jornada sirvió para poner de manifiesto la urgencia de incorporar la salud de las personas como criterio indiscutible en la proyección y ejecución de la arquitectura.
La arquitectura tiene un papel fundamental en la vida cotidiana de las personas, porque nos envuelve e influye en nuestra salud de muchas maneras: desde los edificios donde vivimos y trabajamos, hasta los espacios públicos en los que nos reunimos y socializamos.
La presidenta de la Demarcación de Barcelona del COAC, Sandra Bestraten, dio la bienvenida a los asistentes y presentó el congreso como “un espacio transversal, rico y multidisciplinar que ahonda en la relación entre arquitectura y salud, especialmente en los aspectos de mejora y transformación para mejorar la calidad de vida de la gente”.
En un contexto marcado por la necesidad de promover la descarbonización de la sociedad y la economía circular para cuidar de la salud del planeta, distintos ponentes remarcaron la importancia de investigar y desarrollar estrategias que minimicen o eliminen el uso de materiales y productos que modifican la biodiversidad y tienen consecuencias en nuestra biología.
La intervención magistral del congreso, a cargo de Fernando Valladares, doctor en biología, científico, investigador del CSIC y profesor asociado de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid, reivindicó la arquitectura y el urbanismo como herramientas para mejorar la calidad de vida de las personas, especialmente aquellas que viven en entornos urbanos.
“Las ciudades nos ponen tristes y enfermos”, sentenció, pero “es en estos espacios donde podemos aplicar medidas pare revertirlo, como la inclusión de zonas verdes, que se ha demostrado que mejoran el estado de ánimo de la gente, actúan como barreras acústicas y preservan la biodiversidad”. También instó al colectivo de los arquitectos a “promover la necesaria descarbonización del total del ciclo del edificio”.
En este sentido hablaron los demás ponentes, que remarcaron lo clave que es la salud ambiental en la arquitectura y la importancia de seguir diseñando edificios y espacios que favorezcan la calidad del aire, garanticen la accesibilidad o reduzcan el consumo de energía.
El congreso también quiso dedicar un espacio a la promoción de herramientas y técnicas que contribuyan a la creación de espacios saludables, como pueden ser el uso de materiales naturales y el impacto ambiental, para garantizar la calidad del ambiente del interior de los edificios.
Asimismo, se presentaron distintos ejemplos de buenas prácticas arquitectónicas como las ciudades naturalizadas de Batlleiroig, la construcción con tierra presentada por Elisabetta Carnavale, la bioconstrucción en el ámbito de la vivienda de obra pública explicada por Vivas Arquitectos o los biomateriales, analizados por Jade Serra.
El Congreso de Arquitectura y Salud se celebra con carácter bienal y pretende ofrecer una perspectiva distinta del ejercicio de la arquitectura, con la salud como protagonista.
La ONU, con la publicación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, así como la Unión Europea, con el impulso de la Nueva Bauhaus Europea y la Agenda Urbana 2030 han promovido el debate y las acciones en esta dirección.
Desde el COAC, comprometidos con estos planes y estrategia, hace tiempo que se trabaja para que el colectivo de los arquitectos acceda a formación e información sobre arquitectura sostenible y saludable, como demuestra, por ejemplo, la I Jornada ‘Descarbonizando la Arquitectura’, celebrada en noviembre de 2022.
El evento reunió a más de 400 asistentes, tanto presenciales como virtuales, provenientes de más de 20 países.
Destaca por consumir hasta un 70% menos de energía, en comparación con luminarias convencionales de alta intensidad de descarga.
Del 5 al 8 de noviembre en el pabellón 10, en el estand 10E01 de Comenza en Ifema Madrid, se podrán conocer las novedades de la marca; en concreto, su gama de barandillas fotovoltaicas conecta SOLAR.
Pura Alegría es un amarillo luminoso representa el optimismo, la energía y la creatividad, ofreciendo una respuesta al deseo de transformar los hogares en espacios más luminosos y vitales en un mundo en constante cambio.
Se trata de un proyecto cofinanciado por el programa LIFE, subprograma de Transición a la Energía Limpia, que tiene el objetivo de desarrollar formación presencial y certificación en microcompetencias para la transición verde del sector de la construcción.
Este proyecto está liderado por la empresa Técnicas Reunidas, y además del ITC participa otro centro tecnológico como es AIJU, la empresa Proying XXI Ingeniería, dedicada a la fabricación de hornos de fritas y quemadores, y una empresa usuaria final productora de fritas cerámicas.
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