Construcción, un sector estratégico que demanda transformación digital

En un contexto como el que se está viviendo, en el que la investigación y la innovación han demostrado ser elementos clave para garantizar el progreso de la sociedad y la economía, destaca el papel, cada vez más importante, que están tomando las tecnologías y concretamente la digitalización. 

Consciente de esta realidad, la Plataforma Tecnológica Española de la Construcción (PTEC) ha publicado recientemente los resultados del informe “La transformación digital del sector construcción en España”, una consulta realizada a todo el ecosistema del sector con la finalidad de realizar una radiografía sobre la transformación digital del sector construcción a nivel nacional, recogiendo las estrategias en materia de digitalización implantadas en las organizaciones, las barreras que son necesarias superar y los retos que deben afrontar en el corto y medio plazo.

Esta iniciativa, que se ha llevado a cabo en colaboración con la consultora Ayming España, surge en el marco del grupo de trabajo de la PTEC “Grupo Estratégico para la Transformación digital del Sector de la Construcción”, constituido en 2019 y del que forman parte más de 60 socios, cuyo objetivo es impulsar el uso y la inclusión de las tecnologías en la actividad diaria de las organizaciones que componen el sector.

Este grupo de trabajo toma como base los trabajos ya iniciados por la ECTP (European Construction, built environment and energy efficente building Technology Platform), que en noviembre de 2019 publica la Agenda Estratégica Europea de I+D+i (“ECTP Strategic Research & Innovation Agenda 2021-2027”). En esta agenda se establecen cuatro objetivos claros a alcanzar en 2030, siendo la digitalización uno de ellos.

La cadena de valor del sector construcción está conformada por una amplia diversidad de entidades. Se pueden encontrar desde startups, pequeñas y medianas empresas o grandes compañías, hasta centros tecnológicos (CCTT), universidades u organismos de investigación (OPIs). Sin olvidar otro tipo de entidades, como las asociaciones u otros agentes pertenecientes al sector público, cuya actividad es fundamental en la dinamización e impulso del sector. Y todos ellos, repartidos por toda la geografía española. Para fomentar la participación en la consulta a nivel nacional, además de utilizar los canales de difusión habituales, se contó con el apoyo de entidades representantes (interlocutores) en cada comunidad autónoma, con el objetivo de que hicieran llegar el formulario a un mayor número de agentes en su región.

La empresa es la que mayor representatividad ha tenido -23% mediana empresa, 16% gran empresa y un 21% pequeñas empresas-, seguida de asociaciones/fundaciones y los agentes de conocimiento, como son los centros tecnológicos, universidades y organismos públicos de investigación.

¿Qué resultados arroja la consulta?

El primer dato que se puede extraer de la consulta es que el 98,7% de los agentes consultados entiende la transformación digital como una oportunidad para su organización, afrontándolo como algo positivo y necesario para continuar evolucionando en el sector. Sin embargo, este dato contrasta con el 20% que afirma no tener en su organización una estrategia definida en materia de digitalización y, más aún, con el 8% de quienes han respondido que no saben si existe o no dicha estrategia en su entidad.

En cuanto a la utilización de herramientas digitales, dentro o fuera de una estrategia de mayor alcance, se observa que sí existe un uso extendido de las tecnologías en distintas actividades. 

Más del 80% de los consultados afirma utilizar alguna herramienta digital para la gestión interna o facturación de su organización respectivamente, seguido de un 61% que afirma también utilizar tecnologías para las actividades relacionadas con el marketing. Aproximadamente, una de cada dos entidades utiliza herramientas digitales en la gestión de Recursos Humanos (RRHH) y Ventas, con un 48% y un 43% en cada caso. Tan solo un 3% de los agentes afirma no utilizar herramientas digitales en ninguna de las actividades planteadas.

En cuanto a qué tecnologías son las más usadas en las organizaciones, el cloud computing y el big data se posicionan en lo más alto con el 48% y 45%, respectivamente, mientras que la robótica es una de las menos usadas, con un 16%; junto con “otras tecnologías” que hacen referencia a blockchain, simulación y realidad aumentada/virtual (AR/VR), con un 4%. Cabe destacar que un 20% de los encuestados dice no utilizar ninguna de las tecnologías planteadas.

Formación: queda mucho recorrido

Otro aspecto importante a valorar en la consulta fue la capacitación del personal a la hora de implantar estrategias de transformación digital, tanto a nivel de empleados como de líderes de las organizaciones. La respuesta obtenida fue bastante igualada, puesto que el 42,7% y el 37,3% de los participantes reconoce que los líderes y empleados no disponen de suficientes capacidades o experiencia para abordar planes de digitalización, dejando en evidencia que todavía queda mucho recorrido en cuanto a la formación de personas en este campo.

Según la opinión de los agentes consultados, las habilidades en las que existe una mayor deficiencia son la gestión masiva de datos con un 49% y el análisis de datos complejos con un 44%, mientras que el desarrollo web parece estar técnicamente más controlado, alcanzando solo un 24% de las respuestas.

Principales barreras 

Para analizar las barreras que afronta el sector en relación con la transformación digital, los agentes consultados han valorado inicialmente una serie de barreras a nivel global, obteniéndose de este modo un ranking.

La capacidad de inversión insuficiente se posiciona como la principal barrera alcanzando un 56% de las valoraciones, seguido de la falta de una estrategia de transformación digital en las organizaciones con un 49%, aspecto que contrasta con la respuesta obtenida en los primeros apartados apartado.

Una vez analizadas las barreras del sector a nivel global, los agentes valoraron el impacto de una serie de barreras específicas a la transformación digital que habían sido previamente identificadas por las entidades integrantes del grupo de trabajo.

Las conclusiones que se pueden extraer de la consulta en relación con estas barreras son amplias, pudiendo hacer foco por su impacto según la tipología de agente y/o según su ubicación geográfica. De manera general, se identifican el acercamiento conservador a la innovación, la falta de integración entre los sistemas, la competitividad digital, falta de estandarización y la falta de personal como las cinco barreras más votadas.

En cuanto a la adopción de una postura conservadora frente a la innovación, la más votada, la mayoría de los agentes coincide en que las organizaciones prefieren esperar a que otros impulsen servicios y tecnologías innovadores para posteriormente unirse a esa tendencia.

A esta barrera le sigue en un segundo puesto la falta de integración entre sistemas, confirmándose la existencia de numerosas ineficiencias operativas procedentes de la falta de comunicación e interacción entre sistemas y tecnologías. El tercer puesto lo ocupa la competitividad digital, ya que se ratifica que existe una falta de agilidad para adaptar los modelos de negocio al entorno digital y hacer frente a los nuevos competidores tecnológicos.

Por último, las otras dos barreras más votadas y que se posicionan en el puesto cuatro y cinco del ranking, respectivamente, son la falta de estandarización, que hace referencia a la baja inclusión de soluciones tecnológicas dentro de normativas y estándares, y la falta de personal con experiencia y adecuadamente cualificado.

En cuanto a los retos que afronta el sector de la construcción a corto y medio plazo, de nuevo en la consulta realizada se solicita a los agentes que evalúen la importancia de cada uno de los retos previamente identificados en el grupo de trabajo. De esta valoración se extraen los cinco retos principales y que, por tanto, se posicionan como los principales desafíos a afrontar por el sector.

El reto que se posiciona en el primer puesto persigue corregir las vulnerabilidades existentes del sistema energético, de manera que se garantice la disposición de energía en todo momento. El segundo reto pretende lograr una correcta adaptación de la metodología BIM y que esta sirva como base para la gestión del ciclo de vida y la economía circular. En tercer y cuarto puesto están la mejora de la trazabilidad de los materiales a largo de toda la cadena de suministro a través de la incorporación de tecnologías digitales y la mejora de la resiliencia y seguridad de los edificios e infraestructuras haciendo foco en aquellos de carácter público.

Por último, en el quinto puesto se encuentran dos desafíos que han obtenido la misma puntuación, con los objetivos de garantizar la privacidad de los datos mediante la aplicación de las mejores prácticas y las nuevas tecnologías (MyData, MyBIM), así como el uso de tecnologías IoT (Internet of Things) u otras herramientas digitales para ofrecer un enfoque centrado en el usuario.

Las conclusiones de este informe dejan clara la necesidad de impulsar la transformación digital en el ecosistema del sector de la construcción, siendo evidente que hay que avanzar e innovar. Entonces, ¿qué tipo de proyectos piloto creen los agentes que facilitarían la penetración de las tecnologías digitales en el sector?

En un último bloque de la consulta, los agentes podían aportar su opinión acerca de los mejores pilotos o temáticas para favorecer la incorporación y uso de tecnologías en el sector.

En este sentido, se pudo extraer una serie de palabras clave, claramente indicativas, de la tendencia que se va a seguir e impulsar en los próximos años, tanto a nivel de ámbito de aplicación, como son estructuras acotadas o en el ciclo de vida completo de una obra, como de tecnologías, en las que destaca el blockchain o la realidad virtual o aumentada.

Tecnologías como el blockchain, aplicable a contratos inteligentes para trazabilidad y transparencia y para su combinación con BIM, el IoT para realizar tareas de diseño de forma integrada o el uso de sensores conectados que ofrecen información en tiempo real, permitirán al sector aumentar su competitividad afrontando con garantías el futuro.

Los datos de este informe dejan claro que el sector de la construcción en España coincide en la necesidad de adoptar estas nuevas tecnologías, entendiendo esta transformación digital como una oportunidad. Sin embargo, también deja claro el retraso en la adopción e integración real de estrategias concretas dirigidas a hacer real esta transición tan necesaria, más teniendo en cuenta la inversión que otros países están realizando en materia de I+D+i en el ámbito de la construcción.

Es en esta necesidad de ser competitivos y aprovechar todas las oportunidades que las tecnologías ofrecen en la que se sustenta el trabajo de PTEC como plataforma que lidera iniciativas tecnológicas en el sector español de la construcción, y Ayming España, ayudando a las empresas y diferentes instituciones en la estrategia y obtención de financiación y herramientas que permita a las compañías abordar estos proyectos trasformadores con garantías.

Es el momento de aprovechar las oportunidades de crecimiento y desarrollo disponibles y el nuevo Programa Marco 2021-2027, Horizonte Europa, o el Plan Europeo de Recuperación, Next Generation, en el que la PTEC y sus socios han participado mediante la presentación de más de 32 manifestaciones de interés (MDIs) relacionadas con la digitalización y la transición ecológica, son instrumentos clave en este camino.

El sector de la construcción española tiene un gran reto por delante para el que es necesario la colaboración entre todos los agentes del ecosistema, así como una apuesta fuerte por la innovación, para así alcanzar el potencial máximo del mercado que permita seguir siendo un ejemplo europeo y mundial.

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Este artículo aparece publicado en el nº 569 de CIC, págs. 46 a 49.