Este viernes, 21 de mayo, se inauguró el Pabellón de España en la Bienal de Arquitectura de Venecia. Bajo el título Uncertainty, la exposición comisariada por los cuatro arquitectos canarios Sofía Piñero, Domingo J. González, Andrzej Gwizdala y Fernando Herrera responde al tema propuesto por su comisario, el arquitecto Hashim Sarkis, decano de la Escuela de Arquitectura y Planificación del MIT, que parte de la pregunta: ¿Cómo viviremos juntos?
A la inauguración acudieron Francisco David Lucas Parrón, secretario general de Agenda Urbana y Vivienda; Iñaqui Carnicero, director general de Agenda Urbana y Arquitectura; Guzmán Ignacio Palacio Fernández , director de Relaciones Culturales y Científicas de la Aecid; José Andrés Torres Mora, presidente de Acción Cultural Española; Isabel Izquierdo Peraile, directora de Programación de Acción Cultural Española; Alfonso Dastis, embajador de España en Italia y San Marino; Ruggero Sonino, cónsul honorario de España en Venecia, así como el arquitecto español Rafael Moneo, galardonado este año con el León de Oro a la trayectoria en la Bienal de Venecia.
Por primera vez, España convocó un concurso público anónimo para el comisariado del pabellón, y frente a un jurado de expertos, la propuesta ganadora resultó ser Uncertainty-Incertidumbre. Bajo este lema, el pabellón presenta una selección de 34 proyectos, recogidos a su vez por el equipo a través de una convocatoria abierta, y a la que se presentaron 466 propuestas.
Uncertainty muestra arquitectura de impacto social desde distintas disciplinas, aportando nuevas reflexiones y formas de ejercer un oficio que ha sabido evolucionar para adaptarse a todas las dimensiones y necesidades de una sociedad en constante cambio.
Más allá de este denominador común, la selección de propuestas es muy heterogénea. El pabellón español presenta propuestas que valoran el proceso creativo por encima de la pieza icónica terminada, procesos ejecutados de forma multidisciplinar y con un claro impacto social positivo.
En muchas ocasiones, se trata de proyectos que no se reconocen a primera vista como arquitectura, enfatizando la noción de que nuestro oficio ha trascendido su histórico rol de edificación, adaptándose y mezclándose con otras disciplinas como la música, la poesía, la educación, la agricultura, el cine, la danza, los videojuegos, el turismo y usando nuevas formas de comunicación, como el meme.
En palabras de los comisarios, la exposición del pabellón para esta bienal no admite una respuesta concreta a la pregunta de Sarkis, sino que invita a generar infinitos interrogantes, que, sin embargo, guardan implícita una certeza: el futuro será juntos o no será.
La juventud de los arquitectos que comisarían Uncertainty (los cuatro están cerca de la treintena) permite además tomar una fotografía generacional de la profesión: la trayectoria que cada uno de ellos ha seguido, con sus expectativas y reivindicaciones, construye un mensaje acerca de la adaptación a contextos inciertos, y al papel transversal de la arquitectura dentro del objetivo común del bienestar social.
El Pabellón de España está promovido por el Gobierno de España a través de la Dirección General Agenda Urbana y Arquitectura del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, en colaboración con Acción Cultural Española (AC/E) y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Aecid) y con el apoyo de la Fundación Arquia.
El evento reunió a más de 400 asistentes, tanto presenciales como virtuales, provenientes de más de 20 países.
Destaca por consumir hasta un 70% menos de energía, en comparación con luminarias convencionales de alta intensidad de descarga.
Del 5 al 8 de noviembre en el pabellón 10, en el estand 10E01 de Comenza en Ifema Madrid, se podrán conocer las novedades de la marca; en concreto, su gama de barandillas fotovoltaicas conecta SOLAR.
Pura Alegría es un amarillo luminoso representa el optimismo, la energía y la creatividad, ofreciendo una respuesta al deseo de transformar los hogares en espacios más luminosos y vitales en un mundo en constante cambio.
Se trata de un proyecto cofinanciado por el programa LIFE, subprograma de Transición a la Energía Limpia, que tiene el objetivo de desarrollar formación presencial y certificación en microcompetencias para la transición verde del sector de la construcción.
Este proyecto está liderado por la empresa Técnicas Reunidas, y además del ITC participa otro centro tecnológico como es AIJU, la empresa Proying XXI Ingeniería, dedicada a la fabricación de hornos de fritas y quemadores, y una empresa usuaria final productora de fritas cerámicas.
El acuerdo de abastecimiento sostenible ayuda a reducir la huella de carbono de los equipos de electrificación clave en un 29%.
Comentarios