La construcción tiene por delante muchos retos y, sin ninguna duda, uno de los más importantes es el de la digitalización. Tanto la de nuestras empresas, nuestros trabajadores y nuestros sistemas productivos, como la de otros sectores económicos para transformar España; una labor para la que también estamos dispuestos a ponernos manos a la obra.
El 65% de las constructoras ve “extremadamente difícil” contratar encargados de obra, según el I Informe sobre el Estado de la Mano de Obra, realizado por la Confederación Nacional de la Construcción (CNC) entre casi medio millar de compañías asociadas, cuyos resultados ha presentado su presidente, Pedro Fernández Alén.
La radiografía de la construcción deja un pronóstico claro: es el sector de la recuperación, en la medida en que resulta de vital importancia para impulsar la economía, generar empleo y cubrir algunas de nuestras necesidades sociales más elementales. Dado que se trata de uno de los motores de España, debe representar un papel importante en la canalización de los fondos europeos. Porque sin construcción no habrá reconstrucción.
Los accidentes en jornada laboral en el sector de la construcción cayeron un 15,9% en 2020, situándose en 67.387, según datos de la Confederación Nacional de la Construcción (CNC) dados a conocer con motivo del Día Internacional de la Salud y la Seguridad en el trabajo.
La asamblea electoral de la Confederación Nacional de la Construcción (CNC) ha designado por aclamación al nuevo presidente, que también ocupará el cargo de presidente de la Fundación Laboral de la Construcción.