Este conjunto de edificios no pasará desapercibido en la ciudad de Tarragona. Con su juego de volúmenes y una torre de 19 plantas que se alza imponente, el proyecto arquitectónico no deja de sorprender. El estudio DNA Barcelona, con Aryanour Djalali al frente, ha diseñado estas viviendas como las células de un organismo; todas delimitadas y bien definidas pero, al mismo tiempo, integradas y coherentes con el conjunto.