Las bombas de calor no solo ayudan a potenciar “la descarbonización, la eficiencia energética y el confort”, sino que también contribuyen a “mejorar el empleo de calidad, la reindustrialización, la salud pública y la calidad de vida” de nuestro país, según ha señalado la secretaria de Estado de Energía del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Sara Aagesen Muñoz, en el marco del salón de Climatización y Refrigeración.