El jurado se ha decantado por ambas propuestas por su trascendencia arquitectónica, urbana y social, su vigencia y capacidad de adaptación, y por cómo han modificado la forma de entender la ciudad, entre todas las obras construidas premiadas desde la primera convocatoria en 1972. Con esta 50ª edición, estos galardones de gran prestigio se consolidan como uno de los más longevos del panorama nacional.